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Basurde Xiao Long

Visita de la familia en India. Viernes 31 de marzo - 10 de abril de 2023

Visita de la familia en India. Viernes 31 de marzo - 10 de abril de 2023

465 fotos aquí

 

Video resumen del viaje (23´24¨)

0´04¨: New Delhi

5´06¨: Benarés – Varanasi

12´11¨: Jaipur

19´41¨: Agra (Taj Mahal)

22´02¨: Katmandú

 

Video - Risoterapia – 2 abril 2023 (42¨)

 

Video – Murciélagos en Amber Fort – 4 abril 2023 (11¨)

 

Video – Taj Mahal con mi madre – 6 abril 2023 (20¨)

 

Video -Relive – Katmandú – 7 abril 2023 (1´40¨)

 

 

Del 31 de marzo al 10 de abril de 2023 recibí la visita en India de mi madre, mi hermana, mis cuñados y dos sobris. Aparte del obligatorio Taj Mahal querían ver Benarés y Katmandú, así que este fue el itinerario que preparamos:

 

Viernes 31 de marzo: Llegada a Delhi a las 4:40am

Noche en Delhi, en mi casa. 

Sábado 1 de abril: Vuelo Delhi - Benarés.

Noche en Benarés, en el hotel Ganpati Guest House.

Domingo 2 de abril: Benarés.

Noche en Benarés, en el hotel Ganpati Guest House.

Lunes 3 de abril: Vuelo Benarés – Delhi + en coche Delhi – Jaipur.

Noche en Jaipur, en el hotel Umaid Bhawan.

Martes 4 de abril: Jaipur

Noche en Jaipur, en el hotel Umaid Bhawan.

Miércoles 5 de abril: En coche de Jaipur a Agra.

Noche en Agra, en el hotel Taj Resorts.

Jueves 6 de abril: En tren de Agra a Delhi.

Noche en Delhi, en mi casa.

Viernes 7 de abril. Avión Delhi – Katmandú.

Noche en Katmandú, en el hotel Ambassador Garden Home.

Sábado 7 de abril: Katmandú.

Noche en Katmandú, en el hotel Ambassador Garden Home.

Domingo 8 de abril: Vuelo Katmandú – Delhi.

Noche en mi casa.

Lunes 9 de abril: Delhi y vuelo a Madrid el martes a las 3:15 am.

 

Vamos con la crónica, día a día:

 

VIERNES 31 DE MARZO: LLEGADA A NUEVA DELHI

 

Este fue su plan de vuelo con Turkish Airlines, el jueves 30 de marzo:

TK1858 Madrid (12:00) – Estambul (17:15)

TK716 Estambul (20:20) – Nueva Delhi T3 (4:40+1)

En total un vuelo de 4h15´ + 3h05´ (escala) + 5h50´ = 13h10´

 

En la escuela es posible alquilar coches con conductor, así que reservé una furgoneta tipo Tempo Traveller para ir a recogerlos al aeropuerto. El conductor fue Max.

En el trayecto al aeropuerto me comentó ¨¿vas a recogerlos dentro del aeropuerto o fuera?¨. No le entendí la pregunta. Iba a esperarles fuera, donde espera todo el mundo. Me comentó que pagando 100 rupias (1.11 euros) es posible acceder a una zona de espera que está entre el control de aduanas y donde espera todo el mundo. Es una zona más tranquila, no estás fuera donde están todos esperando, incluidos los conductores que tratan de conseguir pasajeros para sus taxis, estás dentro de la terminal. Así que aprendí algo nuevo que me vendrá muy bien a la hora de recoger a otros colegas que se vengan de visita.

 

Llegaron puntuales y lo primero que hicimos es comprar unas tarjetas de teléfono de Airtel. Ese stand está abierto 24 horas al día. Si al ir a recoger a tus visitantes has accedido a esa zona que menciono en el párrafo anterior, puedes ir con ellos al stand de Airtel. Pero si te has quedado fuera sin pagar esas 100 rupias, no tendrías acceso a esa zona de cafés y tiendas. El plan que cogimos era prepago, de 400 rupias al mes (=4,44 euros). Te van a pedir el pasaporte y sacar una foto (esto es obligación, que no te sorprenda). Una vez que instalas la tarjeta SIM en tu móvil tienes que llamar al número 59059 para activarla, un par de horas después de comprarla. Te va a pedir dos datos:

-Los últimos 4 dígitos del pasaporte.

-Los 4 dígitos del año de nacimiento.

 

Y con eso ya estás conectado.

 

Llegamos a casa. Era viernes y a mí me tocaba currar. Por contrato tenemos algunos días de asuntos propios, pero no te los puedes coger antes o después de las vacaciones. Además ese día no teníamos clase, sino que estaba dedicado a las conferencias semestrales con los padres y alumnos con lo que tocaba ir a currar sí o sí. La familia se quedó en casa, descansó y fue a dar una vuelta por el barrio.

 

Quedamos a las 2 de la tarde. Había reservado un coche de la escuela con conductor (Ram) y esto fue lo que visitamos el viernes:

 

THE RIDGE

 

Es un parque salvaje que está al lado de casa, lleno de monos, chacales, vacas y cerdos salvajes. Solía ir a correr allí, hasta que un colega me enseñó una foto de una cobra con la que se cruzó un día corriendo y se me han quitado las ganas de volver a correr solo por esas rutas, que solían ser senderos (en mi blog las subí).  Por la carretera por la que fuimos no hay problema.

 

En The Ridge hay unas ruinas de un pabellón de caza del siglo XIV llamado Malcha Mahal (Google Maps). La historia del lugar es absolutamente fascinante y el New York Times publicó un artículo al respecto en 2019. Este es el enlace, pero si no eres subscriptor no lo podrás leer. Así que lo he descargado en PDF en inglés y aquí en castellano, usando Google Translate. El lugar estuvo habitado hasta 2016 año en que murió el último supuesto príncipe que se instaló en este pabellón de caza. Viendo el estado en el que se encuentra es difícil imaginar que hace 7 años viviera nadie allí. Desde la terraza hay una fantástica vista del pulmón de Nueva Delhi y de edificios nobles como el Parlamento Indio o la residencia del Presidente.

 

Caminamos un rato por el parque para ver a los monos y vuelta al coche.

 

BIRLA HOUSE

 

El siguiente destino fue Birla House, donde Gandhi vivió sus últimos años y fue asesinado. Así lo describe Lonely Planet:

 

¨Gandhi Smriti

Este emotivo monumento a Mahatma Gandhi se halla en la casa Birla, el lugar donde este fue asesinado a tiros por un radical hindú el 30 de enero de 1948, tras hacer campaña contra la violencia intercomunal. En esta casa Gandhi pasó sus últimos 144 días¨.

 

Unas huellas en el suelo marcan el camino que siguió Gandhi hasta el lugar donde fue asesinado, ahora marcado por un pequeño pabellón.

 

De camino pasamos con el coche por la estatua de la Marcha de la Sal, encabezada por Gandhi, y por la residencia de Indira Gandhi donde fue asesinada.

 

PUERTA DE INDIA

 

El siguiente destino fue un monumento equivalente a la Puerta de Alcalá en Madrid o al Arco del Triunfo en París, la Puerta de India. Así lo describe la guía Lonely Planet:

 

¨En el extremo este del Rajpath se halla la imponente Puerta de la India. Este arco de triunfo de piedra, de 42 m de altura y diseñado por Lutyens, rinde homenaje a los 90.000 soldados indios caídos en la II Guerra Mundial, las operaciones en la frontera noroeste y la Guerra Anglo-Afgana de 1919¨.

 

Había bastante gente y ahí por primera vez mis visitantes experimentaron esa sensación de ser famosos cuando indios te vienen a pedir una foto por ser extranjero.

 

AGRASEN KI BAOLI

 

Así lo describe la guía Lonely Planet:

 

¨Este evocador aljibe del s. XIV antaño estaba en el campo. Tiene 103 peldaños que descienden hasta el fondo, flanqueado por nueve nichos abovedados. Es una curiosidad entre las torres de oficinas que hay al sureste de Connaught Place, particularmente famoso desde que Aamir Khan lo usó como refugio en su película PK, del 2015¨.

 

Esa película está en Netflix y la recomiendo, un buen repaso satírico a las diferentes religiones.

 

Baoli es la palabra que se utilizar en India para referirse a estos pozos escalonados que se utilizaban en la antigüedad para recoger agua. Dependiendo del nivel del agua almacenada (durante el monzón se llenaban) tenían que bajar más o menos escalones.

 

CONNAUGHT PLACE

 

Una de las tarjetas SIMs de Airtel no funcionaba así que nos acercamos a una tienda de Airtel. Era un problema del teléfono, no de la tarjeta. Así describe Lonely Planet el lugar:

 

¨Este confuso barrio comercial circular lleva el nombre del tío de Jorge V, duque de Connaught, y su diseño está inspirado en las columnatas palladianas de Bath. Desde el círculo central de Rajiv Chowk radian calles encaladas, con las manzanas G a N en el círculo exterior y las A a F en el interior. Hoy albergan bares ampulosos, aunque populares, todos muy parecidos, tiendas de cadenas internacionales y algunos hoteles y restaurantes de categoría. Los cazaclientes son muy pesados¨.

 

Visitamos un restaurante, pero no de categoría: McDonalds.

 

FUERTE ROJO

 

Así describe Lonely Planet Lal Qila (nombre original):

 

¨Fundado por el emperador Shah Jahan y rodeado de una muralla de 18 m de altura, tardó 10 años en construirse (1638-1648), y se rumorea que en los cimientos hay cuerpos decapitados de presos (para que dieran suerte). Antaño tenía vistas al río Yamuna, que hoy, reducido su caudal, queda algo más apartado. Un canal arbolado, el nahr-i-bihisht (río del paraíso, que se nutría del río Yamuna, salía del fuerte y discurría a lo largo de Chandni Chowk. Shah Jahan no llegó a vivir en el fuerte; su hijo lo encarceló en el fuerte de Agra¨.

 

Si habéis visitado el Taj Mahal esa historia os sonará. Y sí, Shan Jahan fue el que levantó el célebre Taj Mahal.

 

El último emperador mogol de Delhi fue desalojado de aquí por los británicos en 1857.

 

El fuerte abre para visitas entre las 9 am y las 5 pm. Por la noche, fuera de ese horario, hay un espectáculo de bailes, luces y sonido, llamado Jai Hind Show.

A las 7:15 pm era en hindi, a las 8:45 en inglés. Fuimos a la sesión de hindi para que no se nos hiciera demasiado tarde. El espectáculo precioso, muy recomendable.

 

CHANDNI CHOWK

 

Ram nuestro conductor nos había dejado en el Fuerte Rojo e íbamos a volver a casa por nuestra cuenta. Antes, visitamos la cercana Chandni Chowk, en la Vieja Delhi, que así describe la guía Lonely Planet:

 

¨La calle principal de Vieja Delhi la flanquean templos jainistas, hinduistas y sijs, más una iglesia, y la Fatehpuri Masjid en un extremo. En época de los mogoles, estaba llena de árboles y era muy elegante, con un estanque en el centro en el que se reflejaba la luna, de ahí su nombre, ¨Lugar de la Luna¨, si bien ahora es un hervidero, con pequeños bazares antiguos que salen de ella como tentáculos; es casi imposible cruzar la calle principal de lo llena que va¨.

 

Paseamos por Chadni Chowk, la parte vieja de Delhi. Natalia, mamá, Ander y Fer entraron a un templo hindú, Natalia, mamá y Javi entramos a una Gurudwara, templo sij.

 

Estando en India he llegado a una conclusión: tú no eliges a los guías, los guías te eligen a ti. Mientras paseábamos nos iban siguiendo dos personas con tuk-tuks a pedales para darnos una vuelta por la zona. Dijimos que no, que no, que no, pero al final fue que sí. Nos llevaron por Old Delhi hasta Jama Masjid, la mezquita más grande de Delhi, y es una forma genial de ver el ambiente.

 

De ahí cogimos unos autos (de autorickshaw = tuk-tuk) y a casa a cenar. ¡Fin del primer día en Delhi!

 

SÁBADO 1 DE ABRIL: NUEVA DELHI - BENARÉS

 

El plan para hoy era volar a Benarés. Inicialmente lo íbamos a hacer con la compañía GoFirst pero el 14 de febrero me enviaron un correo electrónico diciendo que por razones operativas cancelaban el vuelo del 1 de abril y me daban opciones para otros días.

Esto puede pasar, pero no dos veces. El 29 de octubre también tenía un vuelo reservado con GoFirst para volver de Benarés con colegas. El 9 de octubre me enviaron el mismo mensaje, cancelando el vuelo para la fecha prevista y dando opciones otros días. En ambos casos he tenido que cancelar los vuelos con GoFirst por esa razón y comprar vuelos diferentes con IndiGo. Así que GoFirst, estás en mi lista de compañías a evitar porque me la has liado dos veces en medio año.

 

Este fue nuestro vuelo con Indigo: 6E 2361 Nueva Delhi T2 (11:20) – Benarés (12:35).

 

Así describe esta ciudad la Guía Visual India:

 

¨Kashi (la Ciudad de la Luz) o Benarés, nombres por los que también se conoce a Varanasi, está situada en la orilla oeste del Ganges y es la ciudad sagrada del hinduismo, con un legado espiritual y religioso que se remonta casi 3.000 años atrás. Es la ciudad de Siva, el más importante de los 12 lugares en los que el dios se enterró y luego se proyectó hacia el cielo en un estremecedor pilar de luz (jyotirlinga). Santificado por la omnipresencia de Siva y del sagrado Ganges, los cerca de 90 ghats que bordean el río definen la vida y la identidad de Varanasi. Estrechándose desde el meridional Assi Ghat hasta el septentrional Adi Keshava Ghat, junto al Malviya Bridge, los ghats ocupan más de 6km. Provistos de templos y santuarios, los ghats vibran con el interminable ciclo de las prácticas religiosas hinduistas¨.

 

Los ghats a los que se refiere son los peldaños a orillas de un río, para acceder fácilmente a él.

 

En Benarés nos alojamos en el hotel Ganpati Guest House, que tiene una terraza con vistas al Ganges y está entre Dashashwamedh Ghat y el mayor crematorio de la ciudad al aire libre y a orillas del Ganges, Manikarnika Ghat. A ambos sitios se podía acceder fácilmente a pie.

 

Reservamos un coche para que nos recogiera en el aeropuerto. Los coches no pueden acceder al centro de Benarés, que es la rivera del Ganges. Las calles son demasiado estrechas para ello. Por esa razón tuvimos que caminar como un kilómetro siguiendo a un empleado del hotel que nos había venido a buscar donde nos dejó el coche.

 

Dejamos las cosas y fuimos a comer a un restaurante cercano, el Dolphin restaurant, a orillas del Ganges.

 

¨El ambiente supera a la comida en el restaurante de la azotea de la Rashmi Guest House, directamente sobre el Man Mandir Ghat, pero aún así es magnífico para una cena. El aireado balcón ofrece magníficas vistas del Ganges, y es uno de los pocos lugares que sirven comida no vegetariana y cerveza, de manera ilícita¨. (Lonely Planet)

 

Posteriormente cogimos una barca con gente local para asistir a la ceremonia del Ganges (en hindi Ganga Aarti). El barquero hablaba en hindi e iba explicando los diferentes ghats (son las zonas de escaleras que dan al Ganges). Pasamos por un crematorio pequeño, Harishchandra Ghat. El motor de la barca no iba bien, iba echando humo negro y se iba parando.

 

Después de dar el tour paramos con la barca enfrente de Dashashwamedeth Ghat, para ver la ceremonia. De este lugar dice lo siguiente la guía Lonely Planet:

 

¨El ghat más animando y pintoresco de la ciudad. Su nombre hace referencia a que Brahma sacrifició (medhi) aquí a sus caballos (aswa). Pese al acoso de los barqueros, floristas, masajistas y ganchos de tiendas de seda, resulta ideal para quedarse un rato a observar a la gente y empaparse del ambiente. A diario acoge a las 19.00 un elaborado popular rito de ganga aarti (adoración) con pujas (oraciones), fuego y danza¨.

 

Más tarde fuimos a un crematorio grande, llamado Manikarnika Ghat. Esto es lo que dice la guía Lonely Planet del lugar:

 

¨El principal ghat de cremación está considerado el lugar más propicio para incinerar a un hinduista. Los cuerpos están a cargo de los parias (doms) y son transportados por los callejones del casco antiguo hasta el sagrado Ganges en una camilla de bambú cubierta de seda. Antes de su incineración se sumergen en el Ganges. En la parte superior del ghat hay grandes montones de leña; cada tronco se pesa cuidadosamente para fijar el precio, que también depende del tipo de madera; la más cara es sándalo. Calcular la cantidad exacta de madera para quemar completamente un cadáver es toda una ciencia. Se pueden presenciar cremaciones, pero siempre desde el respeto, y está prohibido hacer fotografías. Casi con toda seguridad algún sacerdote, o más probablemente un guía intentará llevar al viajero al último piso de algún edificio cercano para verlo y después le pedirá un donativo (en dólares) para el coste de la madera. No se les debe seguir si no se quiere pagar¨.

 

Se nos acercó gente para guiarnos, declinamos las invitaciones y pudimos movernos a nuestro aire, subida a ese primer piso del edificio incluida.

 

Al volver nos perdimos por las callejuelas, volvimos otra vez al Ganges y por la orilla volvimos al hotel. (Natalia, mi madre y yo fuimos de compras y Fer, Ander y Nerea cenaron en el hotel). Finalmente nos reunimos todos en la terraza a comer una sandía.

 

Por las orillas del Ganges se veían santones o falso santones. Me hizo gracias que uno se puso a hablar con nosotros y cuando se acercó otro tiró de palo para espantarlo. Fe sí, pero la vaca por lo que vale, o a Dios rogando y con el mazo dando.

 

DOMINGO 2 DE ABRIL: BENARÉS

 

La noche del sábado estuvimos de cháchara en la terraza del jardín y decidimos no poner ninguna hora para despertarnos. Finalmente nos levantamos sobre las 10:30, desayunamos en el restaurante del Hotel Ganpati donde estábamos alojados y a explorar.

 

En primer lugar nos dirigimos al Yoga Training Center para hacer una sesión de yoga:

 

¨El antiguo militar y maestro de yoga Sunil Kumar y sus socios imparten clases cuatro veces al día en el 2º y 3er piso de este edificio en una callecita cerca al Meer Ghat, aunque siempre se puede pasar para una sesión¨.

 

El maestro es un tipet, como dirían por Castellón. Ya estuve con él en octubre cuando vinieron los colegas. Entre otras cosas hace risoterapia y la verdad es que te lo pasas bien.

 

Posteriormente fuimos al ghat principal (Dashashwamedh Ghat). Ahí a mi madre le dieron un masaje sin pedirlo. En ese ghat conocimos a Moni, una chica india que habla español de maravilla. Negociamos una barca para ir a ver la otra orilla del Ganges. Visitamos Tent City, que son unas tiendas de campañas de lujo que instalan a la orilla del río cuando el Ganges está bajo, entre los meses de noviembre y mayo. El resto del año se desmonta el campamento. La tienda cuesta 10.000 rupias por noche, unos 100 euros. Cerca hay otro complejo de tiendas que debe ser más asequible, llamado ¨Niraan – The Tent City¨.

 

Le preguntamos al barquero a ver si podíamos ir a ver a los Aghoris, que dice la leyenda que son monjes caníbales que se comen restos de cuerpos que han quemado o echado en el Ganges. ¿Leyenda? ¿Realidad? No creo que existan pero haberlos haylos. Una persona en Tent City nos dijo que había una tienda de campaña de 3 agoris justo enfrente del crematorio Manikarnika Ghat, por donde anduvimos la tarde anterior. El barquero nos llevó, atracó en la orilla enfrente de esa tienda de campaña de los agoris y fuimos a ver si estaban ahí. La tienda estaba vacía. Dentro había dos ataúdes y muchos cocos que utilizan de ofrendas (puja).

 

Volvimos a Dashashwamedh Ghat, donde habíamos cogido la barca, y allá nos estaba esperando Moni. Fuimos a comer al Dolphin. A mitad de la comida apareció Moni, que se había ido, y se sentó con nosotros. Nos estuvo contando cosas interesantes de la India. Ella perdió a su hijo o hija, con dos años. A los niños menores de 12 años, mujeres embarazadas, monjes o personas que han muerto por picadura de serpiente no las incineran, sino que las llevan al centro del río y con unas piedras atadas al cuerpo los hunden.

 

Después de comer fuimos con Moni a ver una tienda para saris o kurta, pero no dimos con lo que buscábamos. Nos despedimos de Moni y fuimos a ver el llamado Shri Kashi Vishwanath Temple, un templo al que no se puede entrar con móviles, bolígrafos, relojes inteligentes… Hay que llevar pasaporte para entrar. Llegamos allá a las 18:30, nos dijeron que cerraban a las 5pm. y abrían a las 6 am de la mañana. Mi hermana y yo fuimos al día siguiente, a las 7:30 am.

 

Caminando fuimos a un restaurante llamado Mona Lisa, de estilo más occidental. Allá tomamos unos café y vuelta al hotel Ganpati, donde estuvimos en la terraza un rato tranquilos.

 

LUNES 3 DE ABRIL: BENARÉS – DELHI - JAIPUR

 

Jornada de tránsito.

Mi hermana y yo quedamos a las 7:30 am para ir al Templo de Vishwanath que no pudimos ver el día anterior porque estaba cerrado. Así lo describe la guía Lonely Planet:

 

¨En Benarés hay un templo casi en cada esquina, pero este, dedicado a Vishveswara, nombre de Siva en su encarnación como señor del universo, es el más famoso. Fue construido en 1776 por Ahalya Bai de Indore y 50 años después, el marajá Ranjit Singh de Lahore añadió el recubrimiento de oro (800 kg) de la torre y la cúpula.

La zona está llena de soldados debido a las tensiones entre las diferentes confesiones religiosas. Antes de entrar en el callejón del templo hay que depositar bolsos, cámaras, móviles, bolígrafos y cualquier dispositivo electrónico en las taquillas, si no se han dejado en el hotel. Los extranjeros deben dirigirse a la puerta 2, donde los guardas de seguridad dan orden de saltarse las largas colas de los indios, para luego pasar por un detector de metales y un control de seguridad. Se sigue adelante, ignorando otra cola de indios, hasta que indiquen un mostrador donde hay que enseñar el pasaporte (el original) y depositar el calzado. Entonces se accede al templo por una puerta al otro lado del callejón.

Una vez dentro, la experiencia es realmente intensa, con empujones y pisotones para poder hacer una ofrenda y tocar el lingam (símbolo fálico de Siva), que absuelve de todos los pecados. En los días sagrados los hindúes hacen cola hasta 48 horas para poder entrar. Si los templos hindúes no son una preferencia, quizá no valga la pena tanta molestia.

Por el lado norte del templo de Vishwanath está el pozo de Gyan Kupor. Los fieles creen que beber su agua lleva a un estado espiritual superior, aunque una robusta pantalla de seguridad les impide hacerlo. A los no hindúes tampoco se les permite entrar, lo que se cumple escrupulosamente¨.

 

Desayuno en el hotel Ganpati y a las 9:45 habíamos quedado en la recepción del hotel con la persona que nos tenía que llevar por las calles de Benarés hasta la carretera donde íbamos a coger el coche al aeropuerto.

 

Volamos con la compañía IndiGo de Benarés (13:05) a Delhi (14:40).

 

En el aeropuerto nos estaba esperando Surendra, conductor que nos llevaría esa tarde a Jaipur y posteriormente a Agra. Contraté un coche con conductor a través de una persona llamada Pankaj Singh, de Jaat India Tours. En verano cuando estuvieron mi hermana y mi sobrina también contacté con él y da la casualidad de que nos asignó a Surendra como conductor, que fue el que nos llevó en verano también. Me alegré porque es un tío majo.

 

Del aeropuerto de Delhi fuimos directamente a Jaipur, por una nueva autopista que han abierto recientemente. Al principio de la ruta cayó una buena tormenta, tipo monzón aunque todavía no estamos en fechas. Paramos a comer en una dhaba, que es como en India se conoce a los restaurantes de carretera. Pedimos unos sándwiches y cuando los trajeron vimos que tenían lechuga y alguna otra cosilla. No sé si fue eso o alguna otra historia, de agua o algún otro alimento, pero en los siguientes días excepto mi madre y yo los demás tuvieron problemas de diarrea y alguno vómitos. Upps.

 

Llegamos a Jaipur sobre las 8 pm y nos alojamos en un hotel llamado Umaid Bhawan, en el que te sientes como un marajá de la India. Muy recomendable.

 

MARTES 4 DE ABRIL: JAIPUR

 

Empezamos el día con el buffet de desayuno del hotel Umaid Bhawan.

El plan era salir a las 8:30 am a ver Jaipur. Desafortunadamente Ander causó baja por un virus estomacal, le tocó quedarse descansando y cerca de un baño. Delhi Belly! Fer se quedó con él. 

 

En primer lugar visitamos Hawa Mahal. Así lo describe Lonely Planet:

 

¨Palacio de la Brisa – El monumento más característico de Jaipur es este extraordinario edificio rosa de cinco plantas que recuerda a un delicado panal. Fue construido en 1799 por el marajá Sawai Pratap Singh para que las mujeres de la realeza pudieran contemplar la vida de la ciudad. La planta superior regala unas vistas asombrosas del Jantar Mantar (observatorio astronómico) y del palacio de Jaipur por un lado y sobre Sireh Deori Bazaar por el otro.

También contiene un pequeño museo con miniaturas y algunas suntuosas reliquias, entre ellas una armadura ceremonial, que evocan su pasado real.

Quienes sufran de claustrofobia deben saber que en ocasiones se abarrotan sus angosto pasillos¨.

 

La portada de la última edición de la guía de viajes Lonely Planet India (2021) tiene una foto de Hawa Mahal.

 

Surendra nuestro conductor nos dejó enfrente:

-Mi hermana y yo nos sacamos una foto con un encantador de serpientes, que tenía una cobra.

-Un comerciante (Aritz o de nombre similar) nos cruzó la calle y nos llevó al Tattoo Café, justo enfrente, a una terraza desde la cual se veía el Palacio de la Brisa de maravilla. Nos llevó luego a un mercado de flores y nos acompañó a la entrada al Palacio de la Brisa.

-Visitamos el Palacio de la Brisa.

-Posteriormente pasamos por la tienda de Aritz (la número #58 de esa calle). Estuvimos mirando ropa (sari, pijama, kurta) pero al final no compramos nada. No le gustó eso demasiado a Aritz, que decía que éramos los primeros clientes del día y daba suerte que compráramos algo. La negociación no fue bien. Le fui a dar una propina por habernos llevado al Tattoo Café y hacer de guía pero la rechazo, diciendo que ya era millonario. OK.

 

De ahí fuimos andando al Palacio de Jaipur. Así lo describe la Guía Visual India:

¨En pleno corazón de la ciudad de Jai Singh II, el City Palace ha sido la residencia de los gobernantes de Jaipur desde la primera mitad del siglo XVIII. El gran complejo es una magnífica fusión de arquitectura rajput y mogol, con amplios edificios públicos abiertos de estilo mogol que conducen a dependencias privadas. El complejo está ahora parcialmente abierto al público, como el Maharaja Sawai Man Singh II Museum, popularmente conocido como City Palace Museum. Sus tesoros, que incluyen miniaturas, manuscritos, alfombras mogoles, instrumentos musicales, ropajes reales y armas, proporcionan una espléndida introducción al pasado principesco de Jaipur y a su fascinante artesanía¨.

 

Cogimos aquí un guía en español que nos fue explicando las diferentes estancias. En el llamado patio de los Amantes nos sacamos unas fotos en una de las cuatro puertas que representan las estaciones, y que fue portada de la Guía Lonely Planet edición 2019 que llevábamos encima.

 

Entrar a la residencia donde actualmente reside la familia del marajá actual costaba 4.000 rupias (45 euros) y pasamos.

 

De ahí Surendra nuestro conductor nos llevó al Fuerte de Amber. En el camino paramos en un pozo escalonado. Dice así la Guía Visual:

 

¨El palacio fortificado de Amber fue la ciudadela de los kachhawaha hasta 1727, cuando la capital se trasladó a Jaipur. Los sucesivos gobernantes siguieron acudiendo a él en las grandes ocasiones en busca de la bendición de la diosa de la familia, Shila Devi. La ciudadela la fundó en 1592 Man Singh I sobre los restos de un viejo fuerte del siglo XI, pero son los diversos edificios añadidos por Jai Singh I (reinó 1621-1667) los que forman su magnífico cuerpo central¨.

 

Buscamos un guía en español. Un par de guías en inglés nos ayudaron y dimos con Ravindra Nath. No Tagore, sino Bhattacharya. Apunto aquí su teléfono (+91 9468860397) porque me pareció muy buen guía, habla muy bien español y si vuelvo por allá contactaré con él. Os lo recomiendo. Nos estuvo explicando la fortaleza a fondo:

-El hamán o baño turco.

-El sistema de norias para subir agua.

-El palacio de invierno y el de verano.

-Los aposentos de las diferentes reinas.

 

Además tomaba muy buenas fotos. Por cierto, nos recomendó una película para entender mejor el fuerte y el periodo histórico, ¨Jodhaa Akbar¨, que está en Netflix. Dice así la descripción: ¨En la India del siglo XVI, lo que empieza con una alianza estratégica entre un emperador mogol y una princesa hindú se vuelve una oportunidad para el amor verdadero¨. La peli dura 3h33´, pertenece al género romántico (¡oh no!) y está en hindi con subtítulos disponibles en inglés (no hay subtítulos en castellano). ¡La veremos! He visto que el protagonista de la peli es Hrithik Roshan, al que conozco porque participó en la peli de Bollywood Zindagi Na Milegi Dobara. Poca broma, por ese papel protagonista en Jodhaa Akbar se llevó un premio Filmware al Mejor Actor, que sería el equivalente en Bollywood a los Oscars de Hollywood.

 

Sobre las 6:15pm volvimos hacia el hotel, con la intención de pegarnos un baño en la piscina que cerraba a las 8pm. Pero llegamos a las 7:40pm por haber un atasco monumental en la ciudad.

 

En la terraza vimos un espectáculo de danza rajastaní, con una bailarina y dos músicos. La bailarina dio muestras de su destreza bailando con hasta tres cántaros que se fue poniendo en la cabeza, y de esa guisa se agachó y cogió con la boca un billete sin que se le cayeran. Mucho arte.

 

En el cole en el que trabajo no hay prácticamente españoles, un par de familias solo. Y casualidad, coincidí con una de ellas en ese hotel. Ellos habían ido a Amritsar y su siguiente destino era la reserva de tigres de Ranthambore. En su día estuve por allá, fui en moto desde Delhi, pero no vi ninguno. De vuelta al cole hablé con el estudiante y me dijo que ellos tampoco. Depende mucho del factor suerte.

 

MIÉRCOLES 5 DE ABRIL: JAIPUR - AGRA

 

Empezamos el día temprano. A las 7:10 am llaman a Natalia de recepción para informarle de que un técnico de laboratorio ha llegado para hacerle la PCR a Nerea, que se tiene que hacer en las 72 horas antes de volar a Nepal. La PCR cuesta 700 rupias (7,80 euros) y a las 5:59 pm recibimos un correo electrónico con el resultado negativo de la PCR. Ander y Fernando se encuentran mejor, pero a través del seguro de viaje llaman a un médico que les dice que tomen sales para rehidratarse.

 

Desayunamos en el buffet del hotel, esta vez en la terraza, y a las 9:45 habíamos quedado ya para salir rumbo a Agra, con parada en Elephant Village. Inexplicablemente el miembro más puntual del grupo llegó 10 minutos tarde y el resto del equipo tuvo que esperarle.

 

De camino a Elephant Village (¨el pueblo de los elefantes¨) paramos en la farmacia para comprar sales hidratantes que los que andaban con ¨Delhi Belly¨ (estómago de Delhi = malestar estomacal) se fueron tomando disueltas con agua.

 

Después paramos en una tienda de saris, alfombras, joyas, etc. Nos explicaron cómo hacían la imprimación en tela con tintes naturales, con diseños en tacos de madera. También nos explicaron cómo funcionaba un telar de hacer alfombras. Mi hermana y mi madre compraron unos saris muy bonitos que al día siguiente llevarían al Taj Mahal. 

 

De ahí fuimos a Elephant Village. En Internet podéis encontrar este lugar como Elefun Elephant - The Best Elephant Wildlife Sanctuary

एलेफुं एलिफेंट - द बेस्ट एलिफेंट वाइल्डलाइफ सैंक्चुरी

Traducido = Elefante Eledivertido – El mejor santuario de elefantes.

(Google Maps).

 

Nos asignaron tres elefantes: Lucky, Gulaba y ….. (se me ha olvidado el tercero).

Les dimos de comer, los acariciamos, los pintamos con tintes natuarales y Nerea y Fer en uno, Natalia y mi madre en otro y Ander en otro dieron un paseo montado a lomos de elefantes, mientras yo sacaba unas fotos durante el paseo.

 

Normalmente después del paseo se les suele cepillar y duchar, pero no lo hicimos porque estos elefantes habían estado esta mañana en el fuerte de Amber, después un paseo y el cuerpo estaba caliente -por lo que nos dijeron- y había que esperar a que se refrescaran antes de ducharlos (como cuando vamos a correr y estamos asfixiados y esperamos un poco para ducharnos).

 

De ahí tocaba volver a Agra. Paramos a comer en un restaurante de carretera llamado Motel Gangaur. Llegamos al hotel en Agra sobre las 9 pm. El hotel se llama Taj Resorts y es el mismo en el que estuve con mi hermano y mi sobrina en junio y visité con los colegas para ver la terraza en octubre.

 

Nos despedimos de Surendra, nuestro conductor, que volvía esa misma noche a Delhi.

 

Hicimos el check-in, nos distribuimos en las habitaciones y subimos a la terraza del hotel para tomar algo. Al día siguiente tocaba madrugar, ya que a las 5:30 am habíamos quedado con el guía que nos enseñaría el Taj Mahal, el Sr. Goyal (el mismo guía que les enseño el Taj Mahal a Iñigo y Pau en junio del año pasado).

 

JUEVES 6 DE ABRIL: AGRA – NUEVA DELHI

 

Hoy toca visitar el Taj Mahal, según Rabindranath Tagore (primer Premio Nobel de Literatura indio), ¨una lágrima en la mejilla de la eternidad¨.

 

Así lo describe brevemente la Guía Visual India:

 

¨El Taj Mahal, uno de los edificios más célebres del mundo, fue erigido por el emperador mogol Shah Jahan en memoria de su esposa predilecta, Mumtaz Mahal, que murió el 1631. Sus perfectas proporciones y su exquisita simetría han sido descritos como ¨una visión, un sueño, un poema, una maravilla¨. Este majestuoso mausoleo con jardín, imagen del jardín del paraíso islámico, costó casi 41 millones de rupias y 500 kilos de oro. Alrededor de 20.000 obreros trabajaron en él 12 años hasta completarlo en 1643¨.

 

Después de la visita nos fuimos a desayunar al hotel. Tras el desayuno, mi madre y yo nos fuimos al Fuerte de Agra mientras que el resto de la expedición, con mayores o menores problemas de estómago, se quedaron descansando en el hotel.

 

¨Fuerte de Agra (Lonely Planet):

Aunque eclipsado por el Taj Mahal, no hay que olvidar que Agra tiene uno de los mejores fuertes mogoles de la India. A medida que se atraviesan patios sorprende la escala del lugar.

El emperador Akbar comenzó la construcción del fuerte en la orilla del río Yamuna en 1565, en el terreno de otro anterior. Más tarde, su nieto Sha Yahan añadió más edificios en mármol blanco, su material preferido. La estructura original respondía principalmente a fines militares, pero Sha Yahan la transformó en el palacio que se convertiría en su jaula de oro durante sus últimos ocho años de vida, tras la usurpación del trono por parte de su hijo Aurangzeb en 1658¨.

 

Mi madre y un servidor visitamos algunas tiendas después y volvimos al hotel. Hicimos el check out y en dos tuk-tuks fuimos a la estación de tren, medio de transporte en el que volveríamos a Delhi. Había reservado 6 camas en tercera clase, porque es una buena manera de ver cómo funcionan los trenes en India.

 

Tren 12807: Agra Cantt (14:50) – Delhi Nizamuddin (18:05)

Ese tren tarda 3h15´. Los hay más rápidos, de hora y media, pero quería que vieran cómo son estos trenes litera.

 

Al coger el tren hubo un momento de bastante estrés. Este tren es un tren que había partido el día anterior (5 de abril) a las 9:20 am de una estación en el este de la India llamada Visakhapatnam. La estación de Agra era la estación número 32 de la ruta y en estos casos es normal que haya retrasos. Te van avisando con mensajes en el móvil de cuánto retraso lleva en la última estación por la que pasa. El último mensaje decía que llevaba un retraso de una hora, más o menos.

 

En la estación saqué el ordenador y me puse a hacer unos certificados de salud que teníamos que rellenar online antes de entrar en Nepal al día siguiente. Nos habíamos puesto en el andén 2, que era por donde indicaba que llegaría nuestro tren. Como con un poco de ruido me desconcentro y llevaba un cansancio del viaje importante estaba rellenando todos los formularios mal: donde ponía fecha de caducidad del pasaporte ponía fecha de emisión, tenía que poner los lugares visitados en los últimos 15 días y se me olvidó poner España, etc. Era darme cuenta del error y volverlos a rellenar. Así que andaba centrado en quitarme eso de en medio. Les dije a mi hermana y a Fer que se dieran una vuelta por los luminosos para ver si ponía algo de nuestro tren, se fueron y me llamaron diciendo que el tren salía del andén 3 y que ponía que llegaba en nada. Tocaba correr a buscar el vagón en el que teníamos que subir. En eso andábamos y entró el tren en el andén. Estos son trenes larguísimos y tienes dos minutos para subir. Con el estrés corriendo y no dábamos con el vagón de tercera clase. Finalmente nos subimos en el último, después de una buena carrera. Era el de primera clase y un trabajador del tren nos llevó al de tercera. Tocó correr y fue estresante porque fácilmente nos podíamos haber metido en un vagón equivocado (que puede ser un rollo) o haberlo perdido. Felizmente no pasó nada.

 

La Web de trenes en India funciona muy bien. Antes de tu viaje te llega un correo por si quieres pedir comida. Entre otras cosas puedes pedir Pizza, de Domino´s Pizza. Así que pedimos unas pizzas online para probar. Esta eran las estaciones por las que íbamos a pasar:

#32 – Agra

#33 – Raja ki Mandi

#34 – Mathura

#35 – Faridabad

#36 – Delhi – Nizzamudin

 

Online pedimos tres pizzas para que nos las subieran en la estación de Mathura.

No sabíamos cómo sería el proceso. Si los de Domino´s Pizza las dejan en un vagón y luego los empleados del tren distribuyen los pedidos o como sería el proceso. ¡Y fue alucinante! En los dos minutos en los que paró el tren en Mathura se subió un empleado de Domino´s Pizza con la bolsa que guarda el calor con las tres pizzas, nos las dio y se largo. ¡Impresionante!

Así que el resto del viaje genial, tumbado en una cama comiendo pizza.

 

Llegamos a la estación de tren y cogimos una furgoneta en la que entrábamos todos para ir a mi casa en Delhi.

 

VIERNES 7 DE ABRIL: NUEVA DELHI - KATMANDÚ

 

Otro día que tocaba madrugar. Este era nuestro vuelo a Nepal:

Air India AI 216 Delhi (7:20) – Katmandú (9:25am).

Quedé con Max a las 4:20 am para que nos llevara al aeropuerto.

 

En India teníamos todo cerrado, sabíamos más o menos lo que íbamos a hacer.

En Nepal no habíamos cerrado nada, y para aprovechar el tiempo paramos en una agencia de viajes en el aeropuerto y cerramos un plan con coche y guía. La agencia era Top of the World Adventure. Fer y mi hermana ya habían mirado lo que podíamos hacer antes de hablar con la agencia.

 

Cogimos dos taxis al hotel, Ambassador Garden Home, en la zona de Thamel. Es un hotel muy bonito, con un agradable jardín. Un remanso de paz en medio del caos que es Thamel. Mención especial para uno de los trabajadores del hotel, Vikash, que siempre estaba con una sonrisa.

 

Quedamos con el guía a la 1pm y fuimos a visitar la Plaza Durbar en Patan, que así la describe Lonely Planet:

 

¨La ciudad hermana de Katmandú no recibe la atención que merece. Sede de los comerciantes newar, presenta más cohesión cultural que cualquier otra ciudad de Nepal, con sus templos ocultos y patios budistas interconectados. Se recomienda deambular por sus callejones, y visitar la plaza Durbar y el museo de Patan. Con estupas de la era Ashoka y la mejor selección de restaurantes del valle, vale la pena dedicarle tiempo¨.

 

De ahí fuimos a la Estupa Swayambhunath (también lo llaman el Templo de los Monos) que así describe Lonely Planet:

 

¨La estupa encalada de Swayambhunath es uno de los santuarios budistas más sagrados de Nepal, además de Patrimonio Mundial. La estupa, con los ojos de Buda que todo lo ven, solo sufrió pequeños daños durante el terremoto del 2015. Los peregrinos recorren los santuarios haciendo girar molinos de oración y murmurando mantras, los astrólogos callejeros leen la palma de la mano, y los tenderos venden collares de cuentas sagradas. La vista de Katmandú iluminado al anochecer es espectacular¨.

 

Entramos a una tienda donde nos enseñaron pinturas.

 

De ahí fuimos al casco antiguo de Katmandú y vistamos Durbar Square, Hanuman Dhaka, Freak Stree y la Casa Kumari, la diosa viviente de Katmandú. Tuvimos la oportunidad de verla asomarse a la ventana. En Wikipedia podéis leer más sobre esta figura (Wikipedia – Kumari). De ahí poco a poco fuimos volviendo al hotel, acompañados de nuestro guía que nos iban contando historias.

 

Mi cuñado llevaba desde la primera noche en Jaipur con el estómago mal, diarrea y este día muy flojo. Al llegar al hotel vomitó, y como llevaba ya días llamamos al seguro de viaje, nos dijeron que fuéramos al Norvic International Hospital y allá nos atendieron en urgencias. Le dijeron que estaba deshidratado y que lo mejor era suero intravenoso y que ingresara en el hospital. Eso hizo. El trato del hospital y del seguro (Mondo) de maravilla. A mi hermana también le recomendaron ingresar, también llevaba días así, pero dijo que no se veía para ingresar y que sería un jaleo así que brava como es no lo hizo.

 

Mi hermana se quedó en el hospital acompañando a Fernando y yo me volví para el hotel.

 

SÁBADO 8 DE ABRIL: KATMANDÚ

 

Con el de la agencia habíamos quedado que a las 10 am nos venía a buscar un guía y visitaríamos:

-Bhaktapur Durbar Square

-Baudd Hanath Stupa

-Pashupatinath Temple

-Nagarkot (montañas)

 

Sin embargo le escribí por la noche a Janardan Nepal, de la agencia Top of the Adventure, y le comenté que teníamos a uno del grupo ingresado y que teníamos que cancelar el plan para este día. Lo entendió y de hecho se pasó por el hospital para devolvernos parte del dinero e interesarse, un tío majo.

 

Mi sobri tampoco andaba bien del todo, así que la llevé al hospital después de haber hablado con los del seguro. También recomendaron que ingresara, así que teníamos a padre e hija en dos habitaciones contiguas de la quinta planta ingresadas y a mi hermana por allá.

 

Para mi sobri, mi madre y un servidor (un ratito se escapó mi hermana porque los ingresados habían mejorado con el suero bastante) el plan para ese día, en lugar de turismo, fue ir de compras. En Katmandú se vende un montón de ropa de montaña, de marcas conocidas pero a precios muy populares que hacen indicar que son más falsas que un duro de madera. No diré si compramos o no :-)

 

Por la noche nos fuimos a dar un paseo a Durbar Square. Fue muy agradable, porque sobre las 10 de la noche no había nadie por allá, con todas las tiendas cerradas. Se podía pasear en paz.

 

DOMINGO 9 DE ABRIL: KATMANDÚ – NUEVA DELHI

 

Mi cuñado y mi sobri salieron del hospital con el certificado Fit to Fly e hicimos las últimas compras en Katmandú. De ahí al aeropuerto, a coger el vuelo de Air India AI 216 Katmandú (15:55) – Delhi (17:35).

 

En el aeropuerto cogimos dos taxis prepagos y a casa.

 

LUNES 10 DE ABRIL: NUEVA DELHI

 

Ese día me tocaba currar, vuelta al cole.

 

Ya estaban todos mejor y aprovecharon para hacer turismo por Delhi. Visitaron los siguientes lugares:

 

-Tumba de Humayun: ¨Ubicada en un complejo de edificios de arquitectura mogol, la Tumba de Humayún es uno de los lugares con más historia de Nueva Delhi. Construido unos 80 años antes que el Taj Mahal (no se sabe la fecha exacta) sirvió de inspiración para la construcción de este. Además del edificio con la tumba del propio Humayún, emperador durante una década de los territorios que hoy comprenden Afganistán, Pakistán y el norte de la India, el complejo está repleto de jardines, mezquitas y otras tumbas que más que sepulcros son verdaderos palacios¨.

 

-Qtub Minar: ¨Con 72,5 metros es el alminar de ladrillos más alto del mundo. Inspirado en el Minarete de Jam, en Afganistán, es considerado una de las obras del arte islámico más importantes del país, algo a tener en cuenta y es que el Islam es la segunda religión más practicada de la India, sólo por detrás del hinduismo. Además del minarete, cuyos tonos rojizos resalta la puesta de sol (momento ideal para visitarlo), en el mismo complejo se encuentran la mezquita Quwwat-ul-Islam, construida en el año 1190, la Tumba del Sultán Iltutmish y el Alai Minar, de 24 metros¨.

 

- Mercado Dilli Haat:  ¨Es un mercado al aire libre con entrada paga, una plaza de comida y un bazar artesanal ubicado en Delhi. El área está a cargo de la Corporación de Desarrollo de Transporte y Turismo de Delhi y, a diferencia del mercado semanal tradicional, el pueblo Haat, Dilli Haat es permanente¨.

 

Por la tarde mi hermana fue a una clase de yoga que hay en el colegio a las 5 pm. Les estuve enseñando un poco el campus de cole. Hicimos cuentas, compartimos las fotos y taxi al aeropuerto.

 

MARTES 11 DE ABRIL: NUEVA DELHI – MADRID

 

Vinieron en Turkish Airlines, volvían con Air Italia. Este era el plan de vuelo.

AZ769 Delhi T3 (3:15) – Roma (8:15)

AZ060 Roma (14:35) – Madrid (17:10)

En total 8h30´ + 6h20´ (escala) + 2h35´ = 17h25´

 

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Un privilegio tener a la familia por aquí y poder viajar juntos, lo he disfrutado un montón.

Mis sobris tienen 12 y 14 años. Espero que en un futuro vuelvan a India o Nepal y esta crónica les sirva para recordar su primer viaje a estos destinos.  

 

A mí estas crónicas me sirven también de recuerdo. Por ejemplo para ver lo que hice por Nepal cuando estuve hace 10 años, o cuando visité Agra por primera vez allá por 2008.

2 comentarios

Basurde -

Anécdotas que me vienen a la cabeza una vez escrita la entrada:

-En el tren me puse en una litera que estaba vacía.
En una estación subió una chica, fue a mi litera y me indicó que era su lugar.
Como no era el mío me levanté y me fui.
Después llegó el revisor, vio a la chica india en la litera, le pidió el billete y comprobó que no era su lugar, así que le echó a otro vagón.
Me quedé alucinado. ¿Cómo alguien puede venir con tal sangre fría a echarte de una litera que en primer lugar no es la suya? Impresionante.

-Me alegró ver que mi sobri de 14 años estaba escuchando Fito y los Fitipaldis. Hay esperanza musical con esta nueva generación.

Anónimo -

Maravilloso viaje y que suerte el contar contigo para guiarlos.