Feliz cumpleaños!
Je, je, el dos de Septiembre fue mi cumpleaños, y la verdad es que estuvo bastante bien. Pero no adelantemos acontecimientos, empiezo por el principio.
El sábado pasado, una de las profesoras que vive en mi bloque de apartamentos, donde estamos unos 10 profesores, tuvo que ser ingresada en el hospital. No fue a trabajar, y cuando a la vuelta del currelo fue a visitarle me la encontré hecha una piltrafa, así que cogimos un taxi, y se quedo ingresada. Diagnostico: neumonía! Así que la pobre se paso cinco días en el hospital, y después del trabajo pasábamos a visitarla. Ahora ya esta bien, al 100%, y todos muy contentos.
La semana laboral como ya os he contado es de sábado a miércoles. El miércoles tuvimos fiesta ya que se celebraba la ascensión de Mohammed (que será Mahoma, digo yo) a los cielos. Ya me puedo poner un poco las pilas con la cultura árabe porque estoy más verde que una lechuga. El caso es que no supimos si la fiesta iba a ser el miércoles o el sábado hasta el día anterior.
Así que el martes nos esperaba un largo fin de semana. A la salida del curro nos fuimos a un hotel de lujo a tomar unas cervezas, los compañeros e incluso el director y su mujer. Hay muy buen rollo en el trabajo. La vista desde el hotel, espectacular. Lujo a tope, que es en lo que parece que consiste este país.
El miércoles me lo tome con tranquilidad, y para el jueves había organizado una macrofiesta de cumpleaños en mi apartamento. Envié un e-mail a todos los del colegio, y nos juntamos como unas cuarenta personas o así. Así que de lujo, con bastantes regalos y todo: una marioneta de un camello, una estatua de un arabe, vales para la peluqueria, after-shave, candelabros, un llavero... asi que de regalos he andado bastante bien servido.
El viernes, pues tranquilidad. Recoger un poco la casa, leer, y tomarme las cosas con calma para el colegio.
Y el sábado, a currar. Si el ambiente es bueno, se rinde 100 veces mejor, y aquí el ambiente tanto dentro como fuera del colegio es fenomenal, y espero que dure. Curramos mucho, pero sarna con gusto no pica.
He empezado a correr otra vez, que ya era hora y ya me puedo espabilar si quiero correr la maratón de Dubai en Enero. El miércoles, jueves y viernes hice 5 kilómetros, y hoy ... 3.4km. Je, je, os cuento. Los sábados los corredores que quieren se juntan en un parque, que tiene un perímetro de 3.4 kilómetros. Sobre el maletero de un coche hay una lista, con una caja. Apuntas tu nombre, el tiempo que piensas que vas a hacer, y metes 5 dirhams (algo menos de un euro) en la caja. Sobre el maletero, antes de empezar la carrera se dejan también las llaves de los coches de todos los atletas, para que no molesten. Bueno, pues el tema consiste en correr sin relojes, y cuando cruzas la meta dices un numero que te han asignado, y el que más se acerque a su tiempo previsto, pues gana una botella de vino. Yo he puesto 15:30, y he hecho 15:40, no ha sido mala la aproximación. Sin embargo, he estado lejos de ganar. Estos ya son perros viejos, que llevan haciendo esto bastante tiempo, y en el margen de un par de segundos había un montón de corredores. El que ha ganado, ha clavado el tiempo.
Hemos parado en un libanés a comer unos tacos árabes, los hemos comido en casa de la que estuvo en el hospital, he leído un rato en la piscina, y ahora estoy aquí, en la terraza de casa, con una temperatura ideal, escribiendo en el portátil, y haciendo tiempo hasta las 10, a ver si puedo ver un poco del partido Canadá vs. España de fútbol, ya que tengo un par de apuestas con un par de canadienses.
Gracias a todos los que me habéis felicitado por e-mail. Tenia 20 correos, pero hoy no los he podido leer. Ya los iré contestando poco a poco.
Por lo demás, ando también pendiente de mi hermano y mi cuñada, que en breve me harán tío de una sobrina que se llamara Paula. Seguiremos informando, un abrazo!
El sábado pasado, una de las profesoras que vive en mi bloque de apartamentos, donde estamos unos 10 profesores, tuvo que ser ingresada en el hospital. No fue a trabajar, y cuando a la vuelta del currelo fue a visitarle me la encontré hecha una piltrafa, así que cogimos un taxi, y se quedo ingresada. Diagnostico: neumonía! Así que la pobre se paso cinco días en el hospital, y después del trabajo pasábamos a visitarla. Ahora ya esta bien, al 100%, y todos muy contentos.
La semana laboral como ya os he contado es de sábado a miércoles. El miércoles tuvimos fiesta ya que se celebraba la ascensión de Mohammed (que será Mahoma, digo yo) a los cielos. Ya me puedo poner un poco las pilas con la cultura árabe porque estoy más verde que una lechuga. El caso es que no supimos si la fiesta iba a ser el miércoles o el sábado hasta el día anterior.
Así que el martes nos esperaba un largo fin de semana. A la salida del curro nos fuimos a un hotel de lujo a tomar unas cervezas, los compañeros e incluso el director y su mujer. Hay muy buen rollo en el trabajo. La vista desde el hotel, espectacular. Lujo a tope, que es en lo que parece que consiste este país.
El miércoles me lo tome con tranquilidad, y para el jueves había organizado una macrofiesta de cumpleaños en mi apartamento. Envié un e-mail a todos los del colegio, y nos juntamos como unas cuarenta personas o así. Así que de lujo, con bastantes regalos y todo: una marioneta de un camello, una estatua de un arabe, vales para la peluqueria, after-shave, candelabros, un llavero... asi que de regalos he andado bastante bien servido.
El viernes, pues tranquilidad. Recoger un poco la casa, leer, y tomarme las cosas con calma para el colegio.
Y el sábado, a currar. Si el ambiente es bueno, se rinde 100 veces mejor, y aquí el ambiente tanto dentro como fuera del colegio es fenomenal, y espero que dure. Curramos mucho, pero sarna con gusto no pica.
He empezado a correr otra vez, que ya era hora y ya me puedo espabilar si quiero correr la maratón de Dubai en Enero. El miércoles, jueves y viernes hice 5 kilómetros, y hoy ... 3.4km. Je, je, os cuento. Los sábados los corredores que quieren se juntan en un parque, que tiene un perímetro de 3.4 kilómetros. Sobre el maletero de un coche hay una lista, con una caja. Apuntas tu nombre, el tiempo que piensas que vas a hacer, y metes 5 dirhams (algo menos de un euro) en la caja. Sobre el maletero, antes de empezar la carrera se dejan también las llaves de los coches de todos los atletas, para que no molesten. Bueno, pues el tema consiste en correr sin relojes, y cuando cruzas la meta dices un numero que te han asignado, y el que más se acerque a su tiempo previsto, pues gana una botella de vino. Yo he puesto 15:30, y he hecho 15:40, no ha sido mala la aproximación. Sin embargo, he estado lejos de ganar. Estos ya son perros viejos, que llevan haciendo esto bastante tiempo, y en el margen de un par de segundos había un montón de corredores. El que ha ganado, ha clavado el tiempo.
Hemos parado en un libanés a comer unos tacos árabes, los hemos comido en casa de la que estuvo en el hospital, he leído un rato en la piscina, y ahora estoy aquí, en la terraza de casa, con una temperatura ideal, escribiendo en el portátil, y haciendo tiempo hasta las 10, a ver si puedo ver un poco del partido Canadá vs. España de fútbol, ya que tengo un par de apuestas con un par de canadienses.
Gracias a todos los que me habéis felicitado por e-mail. Tenia 20 correos, pero hoy no los he podido leer. Ya los iré contestando poco a poco.
Por lo demás, ando también pendiente de mi hermano y mi cuñada, que en breve me harán tío de una sobrina que se llamara Paula. Seguiremos informando, un abrazo!
2 comentarios
Lataburu -
Emilio -
bueno a ver si vamos pergueñando una visita por aquellas tierras
venga, keep in touch
PD: voy a ser discreto pq he observado que hay bte gente siguiendo tus historias, pero he de decir que me ha encantado ver lo atento que eres con tus compañeras de trabajo... je, je, je