Visita a las montañas de Huangshan
Antes de leer la ¨chapa¨, os recomiendo que echéis un vistazo a las 123 fotos que he colgado en Picasa.
Huang en mandarín es ¨Amarillo¨, Shan ¨Montaña¨, así que viaje a las Montañas Amarillas.
El lunes 5 de abril en China se celebraba la festividad ¨Qingming¨, el equivalente a nuestro ¨Día de Todos los Santos¨, y un fin de semana largo había que aprovecharlo. Mi intención era escapar de la gran ciudad, ver naturaleza, y por eso escogí este destino. Al principio iba a ir solo, pero comenté mi idea con una amiga china –Yvonne- que no tenía planes para esas fechas y se apuntó.
VIERNES 2 DE ABRIL: SHANGHAI - TUNXI
Termino las clases a las 3 p.m., nos metemos en un taxi a la estación de trenes y a las 17:49 empezamos el viaje a la provincia de Anhui, concretamente a la ciudad de Tunxi. Llegamos a nuestro destino a las 9 a.m., es decir, que pasamos unas 15 horas en el tren para recorrer 450 km. porque el convoy para en casi todas las estaciones. Es una contingencia con la que ya habíamos contado, y habíamos comprado -264 yuanes/litera- un par de literas blandas en un compartimento de cuatro. El que haya viajado por China ya sabe como funciona. La mejor forma de viajar es esa, un cuarto con cuatro camas donde hay cierta intimidad y paz. Después hay otros espacios con 6 literas ¨duras¨, tres enfrente de otras tres y sin puerta, donde cualquiera que pase por el pasillo te ve durmiendo. Luego están los vagones con asientos, e imagino que los tickets para ir de pie, porque había vagones repletos de gente en posición vertical, como en un autobús.
SÁBADO 3 DE ABRIL: TUNXI – HONGCUN - TUNXI
Llegamos a la estación y cogemos el autobús número 12 que nos deja cerca del hostel que teníamos reservado, Ancient Town Youth Hostel.
Es un hostel precioso, con unas terrazas con vistas a la parte antigua del pueblo. Dejamos las mochilas y cogemos un tuc-tuc a la estación de autobuses. El conductor no deja de hablar pero yo claro no entiendo nada. En un momento dado me extiende una tarjeta de visita que cojo. Yvonne me traduce que es fotógrafo y que ahí aparecen fotos suyas:
http://blog.sina.com.cn/huangshanfeng
En la estación de autobuses cogemos uno a Hongcun, a unos 85 kilómetros de Tunxi. La ruta es fantástica, con los campos de colza repletos de flores amarillas, llanuras inundadas de arroz, té, bambú y montañas. ¡Precioso! El horizonte es un mar amarillo, hemos llegado en la mejor época del año.
Para acceder al pueblo –Patrimonio de la Humanidad desde el año 2.000- nos cobran 80 yuanes que bien merecen la pena, por lo bien conservado que se encuentra. Para entrar hay que cruzar un pequeño lago por un bonito puente, y todas las calles cuentan con un canal de agua a la vista que discurre por toda la población. En el centro hay un estanque con forma de media luna. Si se divisa el pueblo de lejos dicen que tiene forma de búfalo, siendo una pequeña colina la cabeza, dos árboles los cuernos, el estómago el estanque y los canales los intestinos. Los cuatro puentes de acceso sería las cuatro patas.
http://www.travelchinaguide.com/attraction/anhui/huangshan/yixian.htm
Hay muchos turistas, pero el 99% chinos. Algunos no parecen muy acostumbrados a ver extranjeros porque tuve que posar para unas cuantas fotos que me pidieron. Incluso le tuve que apuntar mi nombre a uno que se creyó lo que Yvonne le dijo, de que era un actor famoso.
Dentro del pueblo visitamos unas cuantas residencias de ricos comerciantes del pasado, exquisitamente decoradas. Había estudiantes de arte por todos los sitios pintando lienzos.
¡Qué gozada la China rural! Dimos un paseo por los alrededores del pueblo y estuvimos hablando –gracias a Yvonne de traductora- con un paisano que con un arado de una reja y un búfalo estaba trabajando un campo de arroz.
Vuelta a Tunxi, donde estuvimos dando una vuelta por la parte vieja –muy animada-, cena, café y unos billares en el hostel.
DOMINGO 4 DE ABRIL: TUNXI – MONTAÑAS DE HUANSHAN
El día anterior preguntamos por los autobuses para ir a las montañas –a unos 100 kilómetros- y nos dijeron que salía uno a las 6:30 a.m. y otro a las 8:30 a.m., así que reservamos plaza en el de la hora razonable.
Estas montañas son también Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO por su belleza escénica. La cordillera cuenta con numerosos picos de una verticalidad asombrosa. James Cameron, el director de Avatar, citó estas montañas como una de sus influencias a la hora de diseñar el mundo ficticio de la película. Realmente puedes encontrar el parecido, son impresionantes.
El autobús nos deja en una estación y de ahí tenemos que tomar otro, del parque, a una de las entradas -13 yuanes-. Nosotros accedemos por el Templo de Ciguang, o Mercy Ligh Temple, a unos 800 metros de altitud. La entrada al parque cuesta 230 yuanes.
Todas las rutas están pavimentadas: no caminas por sendas naturales, ni subes cuestas sino escalones. La mayoría de las cuestas serían imposibles de subir sin esos escalones, ya que son muy empinadas.
Empezamos la ascensión a las 11:30. Existe la posibilidad de coger un teleférico que te sube media montaña por 80 yuanes, pero descartamos esa opción. Nuestra idea es coronar primero el pico de la Capital Celestial (1.810 m.), pero al llegar al cruce que lleva a esa cima nos encontramos con que se encuentra cerrado por obras de mantenimiento. Así que continuamos nuestra ruta.
A las 14:10 llegamos al pino Ying Ke, o el Pino que da la Bienvenida. Hay una marea de chinos sacándose fotos con el árbol. Yvonne me cuenta que es famosísimo, y que por ejemplo a veces cuando un presidente de otro país viene a Beijing en la foto oficial que se toma en la recepción se puede ver un cuadro de ese pino al fondo. Dicen que tiene más de 1.500 años. Una de las razones por la que está lleno de turistas es porque el teleférico termina no muy lejos de ahí. Si no otro gallo cantaría… :-)
Continuamos subiendo hasta el pico más alto del parque, el Pico de la Flor de Loto (1.864 metros). La subida sigue siendo fácil, porque son escaleras, pero hay tramos que impresionan. En algunos vas por cuevas que se forman entre rocas, en otros los pasos son muy estrechos, no puede pasar más de una persona y la corriente de gente va en ambos sentidos. Algunas zonas son voladizos en una pared vertical y si miras hacia abajo… ¡te cagas! En una zona sin protección mientras nosotros subíamos una pobre chica bajaba llorando, agarrándose a todo el mundo :-) Para alguien que ha andado un poco por el monte no es nada, pero en esta última zona algunos urbanitas lo pueden pasar peor… si hay mucha gente, como era el caso por ser fiesta nacional. Si estás tú solo sin problemas.
El pico estaba tan masificado que cuando a las 15:35 coronamos la cima nos fue difícil sacar una foto con la placa que lo señalaba.
Poco a poco fuimos bajando. Pasamos por el Pico de la Tortuga –todos los picos tienen nombres curiosos- y llegamos al hotel a las 17:00, después de un ¨paseo¨ de cinco horas y media.
El hotel está situado a 1.700 metros, y es el hotel de cuatro estrellas más alto del este de China –en el oeste están los Himalayas, ¡ojo!. Su nombre –Baiyun Hotel- quiere decir ¨Nube Blanca¨.
Ducha, cena en el restaurante y un paseo nocturno. En el exterior había un montón de tiendas de campaña, de gente joven acampando. Hacía frío a esa altura y me acordé de ellos al calor de la calefacción de nuestra habitación, al ir a dormir :-)
LUNES 5 DE ABRIL – MONTAÑAS DE HUANSHAN – TUNXI – HANGZHOU – SUZHOU – SHANGHAI
Una de las cosas por las que es famoso este lugar son los amaneceres, y justo al lado del hotel –Brightness Top a 1.840 m.- hay un lugar perfecto para disfrutarlo. Sin embargo el GRAN problema que tienen los amaneceres es la hora a la que se producen, y pasamos olímpicamente de levantarnos. Empezamos a caminar a las 9:30, pasando por ese lugar desde el que se divisaba una espectacular vista. Seguimos por La Roca Voladora y llegamos a la cresta del Ganso Blanco. Ahí teníamos la opción de coger otro teleférico para bajar los 6.5 kilómetros hasta el Templo del Valle de las Nubes, o seguir a pata que es lo que hicimos.
Bajando me rompía el alma ver a los porteadores subiendo cosas. Había un montón de chinos llevando suministros a los hoteles, ya que no hay carreteras que lleguen hasta allá y todo se hace de esa manera. Si la subida era dura de por si, imagináos cómo lo pasaban con calor, y un par de cestas colgadas de un tronco de bambú. ¡De vez en cuando también veías a dos transportando por la montaña a alguna persona en una silla!
Sobre la 1:30 p.m. llegamos al punto de salida –diferente al de entrada en nuestra ruta- y cogimos el autobús del parque a la estación de autobuses. Vuelta a Tunxi, comimos en un restaurante –un plato de bambú entre otras delicias- y a las 6 p.m. cogimos el autobús de vuelta a Shanghai. Se suponía que era directo y que iba a tardar menos de 5 horas, sin embargo paró en Hangzhou y en Suzhou y llegamos a Shanghai dos minutos después de la medianoche. Taxi a casa, y a currar por la mañana.
Me lo he pasado de miedo este fin de semana largo por las montañas de Huangshan. Sin duda alguna un destino MUY recomendable para todo aquel que disponga de tiempo por esta zona del mundo.
2 comentarios
Castrol -
Bo -
Hay un refrán chino que dice que no visitarás más montañas si has estado en Huangshang. Tenía razón??
Besos
Bo